Eran las 11 PM del día Jueves 6 de Mayo. El técnico interino Pony Castro y algunos jugadores de Torcaza compartían una cena en conocida cantina del barrio de Belgrano ubicada en la calle Juramento esquina Miñones. Todo transcurría en un clima de paz hasta que el Pony pidió la palabra después de lo cual la mitad de los comensales opto por levantarse de la mesa y retirarse del establecimiento.
El técnico interino habría pedido incentivos para convocar a los jugadores, incluso poniendole precio al minuto de juego. Algunos se levantaron indignados pero otros se quedaron y cumplieron con las exigencias extorsivas.
Lo que hay que preguntarse es quienes necesitan pagar para asegurarse minutos de juego en el equipo. Quizás los lectores de este blog puedan darnos algún comentario al respecto.
buenas tardes muchachos!
ResponderEliminarCómo salieron contra Cicatriz?